— ¿Por qué se dejó de pagar impuestos cuando usted ocupaba la presidencia de AeroSur?
— Porque existe un proceso contencioso tributario (NdR. Demanda que interpone el contribuyente para impugnar una determinación de la administración tributaria) que alega que los montos que el Servicio de Impuestos Nacionales dispone que se deben pagar no son los montos que se adeudan, porque las cifras son muy elevadas. También porque exigimos al Gobierno que nos pague el dinero por los impuestos que nos cobró en exceso. Por ello, hay varios procesos que debían seguir su curso, pero con la entrada de los supuestos dueños se suspendieron los procesos en complicidad aparente con el Gobierno. No es que no se pagó impuestos, sino que se pagó los correspondientes y los otros tenían procesos.
— Pero tampoco se pagó el Impuesto a las Utilidades...
— ¿Quién dijo que teníamos utilidades? (...) AeroSur no ha tenido utilidades en ninguna gestión. Usted puede verificar esta información en los balances de la firma. Los otros impuestos (al Valor Agregado y a las Transacciones) se han pagado, lo que sucede es que, según Impuestos, no se canceló el total y eso es una diferencia de concepto. Lo que sucede en el país es que el SIN manda notas de cargo por un monto terriblemente elevado. Por ello, la ley otorga la posibilidad de que un contribuyente se defienda ante la justicia hasta llegar a un acuerdo.
— Antes de que lo despojaran de sus acciones, ¿cuál era la situación financiera de la aerolínea?
— Era una empresa con deudas como otras, pero con una estabilidad financiera y con vuelos permanentes. Entonces, AeroSur estaba valuada de 100 millones a 200 millones de dólares porque tenía rutas consolidadas, un mercado establecido y un prestigio. Ahora, la empresa no vale nada.
— ¿El Estado qué le debe?
— El Estado le debe a AeroSur por el cobro indebido de impuestos en el combustible de uso internacional, por la nueva disposición tarifaria de los vuelos en su debido momento y por los descuentos obligatorios que exige. El monto supera los Bs 1.000 millones. Les pedimos conciliar reiteradas veces, pero nada.
— El Gobierno calificó a la aerolínea como una empresa fantasma. ¿Qué opinión le merece este comentario?
— Por desconocimiento, no puede ser que una empresa fantasma realice vuelos internacionales a Estados Unidos, España, Brasil y Argentina. Una firma fantasma no puede realizar ningún trámite en otros países. Lo que le interesa al Gobierno es destruir a AeroSur.
— ¿AeroSur está en quiebra?
— Yo diría que tiene terribles problemas de funcionamiento y no es sólo por la deuda impositiva, sino por el manejo deficiente de los actuales administradores.
— ¿Con qué patrimonio cuenta actualmente AeroSur?
— El patrimonio de las empresas aéreas no son edificios ni los aviones que tiene porque son firmas que prestan un servicio. AeroSur cuenta con lo que debe tener una firma aérea: tiene oficinas alquiladas, muebles y computadoras para prestar el servicio, equipos de aeropuertos, aviones alquilados. Tiene un mercado establecido y el personal necesario. Cuenta con las certificaciones nacionales e internacionales para efectuar los vuelos. BoA no tiene edificios.
— ¿Cuánto se invirtió para abrir las rutas internacionales?
— Para abrir la ruta Santa Cruz-Miami la empresa invirtió $us 30 millones. Establecer y mantener una ruta es carísimo. Hay temporadas en que la gente no viaja y se tiene que realizar esos vuelos para mantener la ruta. En el país no se considera la apertura de una ruta como un activo. Conseguir el permiso de operación en Europa demanda un proceso de un año. Abrir la ruta a Madrid le costó a la empresa $us 20 millones.
— ¿Usted continúa siendo accionista de la aerolínea?
— Hace 17 meses me despojaron del 70% de las acciones de AeroSur y ahora sólo soy propietario del 7%. Los supuestos dueños se apropiaron de mis acciones de forma ilegal, por eso les inicié un proceso legal. Ellos dicen, no sé si es verdad, que tienen un acuerdo con el Gobierno, que si me botaban de la firma recibirían todos los beneficios de la empresa.
— ¿Por qué no hay cuentas bancarias a nombre de AeroSur?
— En Bolivia la firma tiene cuentas bancarias que están a nombre de personas que manejan la contabilidad de la empresa, pero el que no estén a nombre de AeroSur se debe a un problema legal que tuvo en el Banco del Sur. En el exterior todo el tiempo ha tenido cuentas corrientes a su nombre.
— AeroSur debía presentar un plan de salvataje, ¿por qué no lo ha hecho hasta ahora?
— Lo que pasa es que hay un silencio cómplice entre el Gobierno y los actuales administradores de AeroSur. No he visto a nadie defender a la empresa. El Ejecutivo tampoco se pronunció, sólo se ha limitado a hablar de mí. Nadie defiende a la firma y ahora yo lo hago por los trabajadores.
— ¿Aún se puede hacer algo para salvar a la empresa?
— Como está ahora la empresa es imposible salvarla. Para ello, se necesita que el Gobierno establezca un marco jurídico legal que asegure el funcionamiento de AeroSur a largo plazo y, segundo, sacar a los administradores. Éstos no conocen el mercado y en 17 meses la dejaron como está. Sin ello, no creo que dure mucho tiempo operando.
Perfil
Nombre: Humberto Roca Leigue
Nació:En Santa Cruz
Profesión: Ingeniero Civil
Cargo: Expresidente de AeroSur
Empresario y expresidente de la aerolínea privada
Es el segundo hijo de la familia Roca Leigue. En 1976 se graduó como bachiller en el colegio Alemán de la capital cruceña. Se casó a los 18 años. Se fue con su esposa a vivir a Brasil y allí obtuvo su título profesional en la carrera de Ingeniería Civil. El 24 de agosto de 1992 el empresario fundó la aerolínea AeroSur. La firma inició sus operaciones con un capital de $us 900 mil. El 14 de mayo de 2010, Roca declaró que el Gobierno debería seguir la línea a los ministros para que no roben. Por esta declaración, se le solicitó remitir información sobre los ministros que habrían incurrido en ese delito. El 1 de julio de 2010, al no presentar las pruebas, se informó que se le iniciaría un proceso por desacato y enriquecimiento ilícito. En diciembre de ese año, el Ministerio Público lo imputó formalmente por el delito de enriquecimiento ilícito. Antes de la imputación, Roca viajó a España por motivos de salud y luego se trasladó a Estados Unidos. En ese mismo mes, el directorio de la compañía aérea destituyó a Roca de su cargo y posesionó a Sergio Sanzetenea.
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