Con la incorporación de un Boeing 747-400, AeroSur cuenta con seis aviones que cubrirán sus rutas a nivel nacional e internacional. Empero, dos expertos coinciden en que el alquiler de esa nave es sólo una solución parcial a la crisis por la que atraviesa la empresa.
El Viernes Santo arribó al aeropuerto de Viru Viru, en Santa Cruz, la aeronave que reemplazará al Torísimo y que cubrirá la ruta hacia Madrid (España). Ese avión se suma a la flota de cinco naves que opera la empresa, tres de ellos Boeing 767-300, un 727-200 y un 767-200, que cubre la ruta a Estados Unidos.
Se prevé que AeroSur retome en una semana las operaciones a Madrid, debido a que todavía faltan los permisos de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y de las autoridades aeronáuticas de España para el ingreso de la aeronave.
En principio operará hasta cubrir el traslado de todos los pasajeros, pero luego su itinerario se reducirá a un vuelo por semana, con posibilidad de ampliarlo a dos, según fuentes de AeroSur.
La aeronave tiene una capacidad para trasladar 450 pasajeros y 18 tripulantes.
Wilson Villarroel, ex autoridad de la desaparecida Superintendencia de Transportes, consideró el alquiler del Boeing 747-400 es sólo una solución coyuntural a la crisis por la que atraviesa la compañía.
Según el Gobierno, la empresa adeuda 1.338,3 millones de bolivianos al fisco, 12 millones de bolivianos a sus trabajadores, cuatro millones a ENTEL, cinco millones a Aasana, Además de 16,9 millones de bolivianos a las AFP por aportes de jubilación.
“El que traigan un avión es una señal relativamente alentadora de la empresa porque el problema se va a suscitar en los vuelos internacionales (...). Esa nave va a salvar algunas urgencias, pero no es solución definitiva o de fondo”, dijo Villarroel.
Entretanto, el analista Armando Álvarez explicó que la nueva aeronave puede ayudar a mejorar los ingresos de esa compañía y eventualmente enfrentar la crisis por la que atraviesa, aunque ello también dependerá de las condiciones del servicio y del precio de los pasajes. Empero dijo que AeroSur aún debe analizar sus ingresos y demostrar que puede cumplir sus pasivos.
Villarroel aseguró que el hecho de que la empresa haya podido alquilar una aeronave no se debe a la confianza que tiene en el exterior, si no que su ruta a Madrid es su garantía para pagar el arrendamiento. Similar fue el criterio de Álvarez, quien consideró que el flujo de ingresos por la venta de pasajes le permitirá cubrir el contrato.
Crisis se evidenció por una deuda
La crisis de AeroSur se puso de manifiesto en las últimas semanas a raíz de la deuda con el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), la que comenzó a ser cobrada a través de la retención de ingresos por la venta de pasajes.
De acuerdo a datos del fisco, AeroSur adeuda 108,7 millones de bolivianos que data del año 2004, cuyo cobro comenzó a hacerse efectivo porque la empresa perdió un proceso en instancias judiciales.
Sin embargo, no es ésa la única deuda con impuestos. Están pendientes de cobro 122,1 millones de bolivianos, para los que se iniciaron al menos 30 procesos que están pendientes de resolución en instancias judiciales.
Adicionalmente, dos procesos de fiscalización a las gestiones 2006 y 2007 dieron como resultado obligaciones pendientes por más de 1.107,5 millones de bolivianos.
En total la deuda con sentencia ejecutoriada y las que están en proceso suman 1.338,3 millones de bolivianos.
A esa obligación con el fisco se suman el no pago de 12 millones de bolivianos a sus trabajadores; cuatro millones de bolivianos a ENTEL, cinco millones de bolivainos a Aasana. Además de 16,9 millones de bolivianos a las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) por aportes de jubilación.
AeroSur presentó dos planes de contingencia, pero la Autoridad de Telecomunicaciones y Transportes lo ve insuficiente. El Gobierno dice que AeroSur es una empresa en quiebra y que no es real, por lo que le pidió transparentarse.
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