“El servicio y de oferta de aerolíneas en el mercado aeronáutico doméstico están desmejorados. Ahora que las estatales BoA y el TAM -esta última depende del Ministerio de Defensa- acaparan el tráfico aéreo comercial por el hueco que dejó AeroSur, transportarse en avión es una odisea”, se quejó Luis Iriarte, al descender del avión del TAM, en Viru Viru, proveniente de Cochabamba.
Según él, dichas aerolíneas registran fallas en el servicio. “En ambas cuesta conseguir boleto por el factor de ocupación que registran los aviones. Los vuelos se demoran e imprevisadamente cambian los itinerarios e incluyen conexiones. En el caso del TAM es más grave porque nadie fiscaliza sus operaciones”, dijo Iriarte.
En un recorrido por los aeropuertos El Trompillo y Viru Viru se verificó que el tráfico aéreo es alto, lo que motiva desesperación y molestia entre los pasajeros.
En Cochabamba y La Paz el escenario es parecido. Según los diarios Los Tiempos (Cochabamba) y La Prensa (La Paz) en estos distritos los pasajeros también denuncian irregularidades en el servicio, particularmente retrasos y desvíos de vuelos, prórroga de pasajeros en lista de espera y sobreventa de billetes.
Respecto a supuestas fallas en el servicio, el gerente general de BoA, Ronald Casso, refirió que si bien el factor de ocupación en las aeronaves creció por la crisis de AeroSur, el personal de la compañía trabaja de manera eficiente para responder al crecimiento de la demanda. La frecuencia de vuelos pasó de 36 a 46 por día y el transporte de pasajeros de 90.000 a 120.000 en marzo y abril.
Así, el ejecutivo refutó los comentarios de los pasajeros e indicó que los números prueban la solidez y preferencia por la estatal. “BoA se creó en marzo de 2009 con completa regularidad en su conformación y estructura jurídico-administrativa. Tiene cuentas bancarias, estados financieros, flujos definidos y procedimientos establecidos”, dijo Casso.
Aclaró que si bien en 2009 la compañía recibió del Estado $us 15 millones para la constitución de la firma, en 2010 empezó a generar utilidades y gozar de autonomía plena de gestión. En 2010 BoA recaudó más de Bs 14 millones (se reinvirtió) y el año pasado cerró con utilidades por más de Bs 4 millones. “Pasamos de cuatro a seis aviones, de 400 a 600 empleados, abrimos oficinas internacionales, se cambió el sistema de boletaje, que era una limitación, y se invirtió más de $us 2 millones en sistemas computacionales. Aparte, recibimos una inyección de capital del Tesoro General del Estado (TGE) de $us 8 millones para la compra exclusiva de repuestos y equipos”, dijo Casso, al referir que BoA no tiene preferencias del Estado y que cumple con sus obligaciones tributarias y pago de servicios aeroportuarios como lo hacen las otras aerolíneas.
Hasta marzo 2012, a decir de Casso, aportó Bs 104,5 millones al fisco, equivalentes a 6,3 veces el capital de conformación. “En términos comparativos hemos devuelto al fisco el 80% del capital que destinó para crear la empresa”, expuso Casso.
BoA dispone de seis aviones y alista la incorporación de uno más para potenciar las frecuencias y vuelos nacionales e internacionales. Prevé que el séptimo avión llegue en julio, mes en el que aspira iniciar operaciones a Madrid (España).
Se calcula que actualmente BoA tiene un 80% de participación en el mercado aeronáutico.
En la otra vereda, el TAM, que también es estatal, aunque se rige por códigos y normas de la aviación militar por la relación de dependencia directa del Ministerio de Defensa -brazo operativo de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB)-, prevé potenciar su flota con dos naves a ser incorporadas en las próximas semanas.
Cuenta con tres aviones BAE, dos en operación y uno en mantenimiento, el Boeing 727-200 Tupac Katari adquirido de Aerolíneas Sudamericanas (AS) y el Boeing 727-200 que alquila al LAB.
Indicaron que si bien no son regulados por la Autoridad de Control y Fiscalización de Transportes y Telecomunicaciones (ATT) se ajustan parcialmente a la normativa de la aviación comercial y que como los otros operadores del mercado aeronáutico, pagan por los servicios que reciben de Sabsa y Aasana.
Aseguran que TAM no tiene preferencia del Estado en sus operaciones comerciales.
Fue difícil recabar más datos por la limitación de acceso a información, los voceros tenían desactivado su equipo móvil.
En torno a los reclamos de los pasajeros por fallas en el servicio en la ATT, dieron cuenta de que se recibieron tres reclamos, en mayo, contra el TAM por retraso de vuelos.
Detallaron que en la Ley General de Transporte 0165 la aerolínea TAM será incluida en el marco de regulación comercial y deberá ajustarse a la normativa.
OPERADORES AÉREOS EN EL CONTEXTO NACIONAL
BoA
Potencia su flota de aviones
Con relación al tráfico aéreo escaló de 36 a 46 vuelos por día y respecto al transporte de pasajeros, de 90.0000 (noviembre de 2011) a 120.000 (abril). Tiene en operaciones seis aeronaves y prevé incorporar hasta diciembre tres más para potenciar su flota. A fines de junio traerá una aeronave de Porto Alegre (Brasil) para reforzar la frecuencia de vuelos en destinos nacionales.
AeroSur
Se debate en una crisis
Hasta febrero, AeroSur prestaba servicios de transporte aéreo regular a seis destinos nacionales y a nueve internacionales mediante las operaciones de un aproximado de siete aeronaves, promedio que se establece tomando en cuenta los servicios de mantenimiento programados y no programados. AeroSur llegó a transportar cada semana 12.000 pasajeros, un 42% del tráfico total en rutas nacionales.
Aerocon
Refuerza actividad comercial
Aerocon incrementó la frecuencia de vuelos de 52 a 55 por día. Cobija, Sucre y Tarija son los destinos que registran mayor demanda comercial de pasajes por la desaparición de AeroSur. Este factor motivó la incorporación de una aeronave -son ocho- para potenciar sus vuelos a escala nacional y abrir la ruta La Paz-Sucre. Aerocon ofrece 10 destinos nacionales y transporta unos 15.000 pasajeros por mes.
TAM
Gana espacio en el mercado
Cuenta en la actualidad con tres aviones BAE, dos operaciones comerciales y uno en mantenimiento, además tienen arrendado el Boeing 727-200 de propiedad del Lloyd Aéreo Boliviano (LAB) y hace poco incorporó a su flota el Boeing 727-200 Tupac Katari. Se estima que desde Santa Cruz transporta un promedio de 250 pasajeros y 300 kilos de carga por jornada.
PUNTO DE VISTA
“Hay desprotección en el TAM, que no es regulado”
Jorge Auza/Exintendente de Transporte
El equilibrio de la oferta y la demanda en el mercado aeronáutico de nuestro país es muy sensible a cualquier cambio. En este momento la actual crisis financiera e institucional que toca a AeroSur está afectando al conjunto de los demandantes de servicios aéreos comerciales, porque activó el monopolio en favor de las estatales BoA y el TAM.
Desde luego, el alto tráfico aéreo que se presenta por la salida de AeroSur provocará un desequilibrio y motivará una serie de reclamos de los pasajeros afectados, aunque lo tangible y favorable para los que accedan a un boleto de BoA es que este operador está regulado y sometido a las normas de regulación de la ATT y cualquier reclamo será motivo de una respuesta y compensado en caso de que la solicitud del afectado proceda y se verifique una falla del servicio.
En este caso, el personal que trabaja en las Oficinas de Defensa al Consumidor (Odeco) habilitadas en cada aeropuerto del país debe obligar a los operadores aéreos que incurran en faltas a dar la cobertura correspondiente a fin de hacer respetar el derecho de los usuarios.
El problema se presenta con el TAM, porque no es regulado. Si bien cumple con la normativa vigente de regulación de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), no sucede lo propio con la ATT porque nunca aceptó someterse a las reglas de aviación comercial, pese a que presta este servicio.
Antepone el carácter militar para evitar ser regulado. Si bien la pertenencia de los aviones corresponde a la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), están siendo ocupados para actividades comerciales a civiles, corresponde que sus operaciones sean fiscalizadas por la ATT.
En este caso del TAM, los usuarios están desprotegidos porque cualquier reclamo cae ‘en saco roto’, vulnerándose vilmente los derechos de los pasajeros.
En los aeropuertos
Cristian Dorado
Publicista
“La debacle de AeroSur desató una serie de improvisaciones en las aerolíneas que operan en rutas nacionales. Hoy (por el jueves) el vuelo Santa Cruz-Cochabamba del TAM se retrasó tres horas y nadie explicó el motivo a los pasajeros. Aunque parezca hipócrita, casi pierdo un negocio por esta causa”.
Limber Mamani
Publicista
“Cuando AeroSur estaba en el negocio aéreo tenía una ventaja porque ofrecía el vuelo directo Cobija-Santa Cruz, lo que permitía llegar a la capital cruceña para hacer compras y esperar el vuelo de retorno el mismo día. Ahora estamos sometidos a los vuelos con escalas, lo que deriva en pérdida de tiempo”.
José Hilari
Pasajero
“Soy boliviano, pero por motivos de trabajo radico en Frankfurt (Alemania). Cuando operaba AeroSur los usuarios nacionales y extranjeros tenían la ventaja del vuelo directo. Ahora es más difícil conseguir billete y las conexiones generan pérdida de tiempo y más gasto. El servicio en rutas nacionales es malo”.
Antonieta Illanes
Ama de casa
“La crisis de AeroSur desequilibró el mercado aeronáutico porque las estatales BoA y el TAM han monopolizado el servicio. Ahora es más difícil conseguir pasajes e incluso atribuyendo el inicio de la temporada alta subieron el precio del billete al límite establecido por la autoridad de regulación ATT”.
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