Encontrar aviones que se estrellaron en la selva, describir con detalles exactos lugares remotos en los que no se puso el pie, adivinar el contenido de un sobre cerrado... todo esto es posible gracias a la técnica Remote viewing (visión remota).
Suena a magia, pero el psíquico Martin Zoller asegura que es un fenómeno natural que hace uso de la intuición innata que todo ser humano posee para lograr estas proezas.
“Cada uno de nosotros tiene intuición. Este es un sentido que usamos en la vida diaria instintivamente. Lo que hace el Remote viewing es entrenar esta intuición y poder utilizarla de forma voluntaria cuando se la necesite”, indica Zoller, quien organizará en abril una serie de talleres en La Paz para enseñar esta técnica.
La base, como para muchas otras disciplinas mentales, espirituales y psíquicas, es la meditación y la práctica, mucha práctica, como recomiendan Zoller y la Asociación Internacional de Remote Viewing (IRVA).
El primer paso para aprender a utilizar este instinto consiste en visualizar una fotografía que se mantiene en un sobre cerrado. “Después de meditar, el estudiante se concentra y trata de adivinar qué imagen es la que se eligió”, explica Zoller.
Zoller afirma que, con cada paso de este proceso educativo del instinto, el interesado tendrá un éxito del 80 por ciento. Con este talento, el practicante pondrá mejorar sus relaciones, ya que la aplicación del Remote viewing permitirá “leer” mejor lo que en verdad necesitan otras personas. Además, según sus defensores, se desarrollará una mayor confianza en uno mismo, facilitando el análisis de las situaciones conflictivas y permitiendo encontrar mejores soluciones a problemas cotidianos, ya que se tiene una visión amplia del asunto.
Experto
Martin Zoller muestra su currículum como prueba de la eficacia de esta técnica, ya que, a finales de los 90, ayudó a rescatar un avión caído en las selvas de Bolivia y colaboró con la policía alemana.
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