El presidente Evo Morales aseguró que las obras de construcción del aeropuerto Alcantarí, en el departamento de Chuquisaca y cerca de la ciudad de Sucre, capital de Bolivia, donde aterrizó el jueves, tuvieron un reajuste en el cronograma y que, por lo tanto, será entregado el 4 de noviembre que viene.
“Un aplauso para nuestros obreros”, fue lo primero que dijo el Mandatario, minutos antes de iniciar la inspección a la obra, que es un regalo anticipado a los 205 años del Primer Grito Libertario de América que se escuchó en Sucre en 1809 y que marca la efeméride de la ciudad.
“Imagínense, la terminal de pasajeros (de Alcantarí) será monumental, frente a la terminal de pasajeros que tenemos en Sucre”, manifestó.
El avión presidencial a bordo del jefe de Estado y su comitiva aterrizó, por primera vez, en la franja de 1.500 m de longitud del aeropuerto, que tendrá finalmente 3,6 km de longitud, para realizar la inspección a la infraestructura aeroportuaria.
El propio Morales constató que el avance de las obras civiles se sitúa en el orden del 60%. Recordó la realización de la Asamblea Constituyente en la ciudad de Sucre, donde se consolidó el proceso autonómico, aspecto que permite a las entidades territoriales velar directamente por su desarrollo.
A partir de ese entonces, reseñó, se reasume la responsabilidad de construir el Aeropuerto Internacional de Alcantarí. Sucre se sirve de un modesto aeródromo emplazado en la zona de Surapata, a 10 minutos en coche de la ciudad de medio millón de habitantes. Asimismo dijo que la obra esperada por Chuquisaca dio el primer paso a la realidad el 28 de julio de 2010, a poco más de dos meses de asumir el mando del departamento el gobernador Esteban Urquizu, quien se reunió con los pobladores de las comunidades de Yamparáez y alcanzó un acuerdo que permita la adquisición de terrenos destinados a este proyecto.
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