El promotor de la construcción de esta avioneta, Marcelo Miralles Iporre, quien es piloto comercial señaló que el proceso de construcción demoró un año y medio, manifestó que estuvo de acuerdo al tiempo y cronograma previsto en base a la planificación que se hizo.
Sin embargo aseguró que se tuvo que esperar un largo tiempo, casi siete meses, para obtener la certificación de la Dirección de Aeronáutica Civil (DGAC), que autoriza a realizar vuelos, pero finalmente ayer se pudo poner a volar la aeronave.
"El vuelo de prueba es el primero de una serie que se debe realizar, no es uno solo, entonces todavía se tiene que hacer algunos ajustes más para decir está listo, pero por lo menos ya salió y estuvo en el aire" sostuvo Miralles.
Explicó que todos los materiales y diseño son de origen canadiense y el motor fue hecho en Estados Unidos, pero toda la construcción desde remachar, doblar planchas, poner pernos hacer los agujeros se realizó en Oruro, por tanto se puede decir que la avioneta fue construida en Oruro.
Detalló que es un avión adecuado para la gente agrícola, que tiene estancias, porque se puede emplear para la fumigación y se puede poner un buzón de carga para utilizar como transporte de víveres, vacunas a las zonas anegadas en el oriente boliviano, señaló que puede operar en pistas cortas y no necesariamente de asfalto sino también en tierra, pasto y otras.
Comentó que no es la primera experiencia en construir una avioneta, puesto que en 2003 se aventuró a fabricar una aeronave que concluyó en 2005, manifestó que operó durante dos años en Cochabamba y después fue vendida, actualmente se encuentra volando en la ciudad de Santa Cruz.
El equipo que trabajó en la construcción de la avioneta que tiene un motor Lycoming de 180 caballos de fuerza, estuvo a cargo de Marcelo Miralles Iporre, Ever Ferrufino y Marcelo Gutiérrez.
"Me siento contento y orgulloso, no solo por mí sino por la gente que me apoyó, sobre todo Ever y Marcelo", dijo Miralles.
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