Después de dos años de servicio, el capitán Javier García fue alejado ayer de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y sustituido por el general Carlos Antelo Lenz, quien fue posesionado por el ministro de Obras Públicas, Óscar Coca.
De acuerdo con el titular de ese Ministerio, el cambio se debe a una rotación administrativa en la que García cumplió su periodo en la DGAC y ahora cumplirá otras tareas en el Gobierno.
Sin embargo, fuentes del sector aeronáutico informaron que Javier García fue destituido, entre otras cosas, por haber otorgado autorizaciones a empresas grandes para realizar vuelos charter (no regulares), cuando esta entidad sólo debe cumplir funciones netamente técnicas.
“El ex director hizo mucho ruido al tener problemas con algunas empresas aéreas, sobre todo con el ingreso de Aerolíneas Sudamericanas (AS), y tuvo bastantes reclamos jurídicos”, dijo una de las fuentes consultadas.
García indicó que el cambio no le tomó de sorpresa porque ya le habían anunciado, justamente en el marco de los proyectos que se impulsarán en el Ministerio de Obras Públicas. Dijo estar satisfecho y contento con la labor cumplida.
Respecto al nuevo Director de la DGAC, éste fue Jefe de Estado del Comando en Jefe de las Fuerzas Armadas hasta diciembre del año pasado. En la actualidad está en la reserva activa. Antelo es egresado del Colegio Militar de Aviación, en la promoción 1974.
Súper y LAB liman asperezas
En una reunión que duró algo más de dos horas, ayer el superintendente de Transportes, Wilson Villarroel, y el director del Lloyd Aéreo Boliviano (LAB), Marcelo Goldman, limaron asperezas luego de algunas alusiones personales que se dieron en los últimos días.
En la oportunidad se programó, para el lunes, una reunión técnica oficial en la que se analizarán cifras documentadas que demuestren la sostenibilidad financiera y técnica de la empresa, además de garantizar que ésta pueda cumplir vuelos regulares con normalidad.
A la salida de la reunión, Goldman dijo haber encontrado predisposición en la Superintendencia para llegar a una solución y que el LAB cuenta con naves para continuar con sus servicios. El Lloyd debe demostrar que puede cumplir con el seguro, el combustible y otras obligaciones para lograr una nueva licencia.
De acuerdo con el titular de ese Ministerio, el cambio se debe a una rotación administrativa en la que García cumplió su periodo en la DGAC y ahora cumplirá otras tareas en el Gobierno.
Sin embargo, fuentes del sector aeronáutico informaron que Javier García fue destituido, entre otras cosas, por haber otorgado autorizaciones a empresas grandes para realizar vuelos charter (no regulares), cuando esta entidad sólo debe cumplir funciones netamente técnicas.
“El ex director hizo mucho ruido al tener problemas con algunas empresas aéreas, sobre todo con el ingreso de Aerolíneas Sudamericanas (AS), y tuvo bastantes reclamos jurídicos”, dijo una de las fuentes consultadas.
García indicó que el cambio no le tomó de sorpresa porque ya le habían anunciado, justamente en el marco de los proyectos que se impulsarán en el Ministerio de Obras Públicas. Dijo estar satisfecho y contento con la labor cumplida.
Respecto al nuevo Director de la DGAC, éste fue Jefe de Estado del Comando en Jefe de las Fuerzas Armadas hasta diciembre del año pasado. En la actualidad está en la reserva activa. Antelo es egresado del Colegio Militar de Aviación, en la promoción 1974.
Súper y LAB liman asperezas
En una reunión que duró algo más de dos horas, ayer el superintendente de Transportes, Wilson Villarroel, y el director del Lloyd Aéreo Boliviano (LAB), Marcelo Goldman, limaron asperezas luego de algunas alusiones personales que se dieron en los últimos días.
En la oportunidad se programó, para el lunes, una reunión técnica oficial en la que se analizarán cifras documentadas que demuestren la sostenibilidad financiera y técnica de la empresa, además de garantizar que ésta pueda cumplir vuelos regulares con normalidad.
A la salida de la reunión, Goldman dijo haber encontrado predisposición en la Superintendencia para llegar a una solución y que el LAB cuenta con naves para continuar con sus servicios. El Lloyd debe demostrar que puede cumplir con el seguro, el combustible y otras obligaciones para lograr una nueva licencia.
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