En la transformación del Transporte Aéreo Militar (TAM) en una empresa civil comercial y regulada por las instituciones que controlan la actividad aeronáutica del país, de acuerdo con el Ministerio de Defensa, nada tuvo que ver el accidente sufrido por LaMia.
En reiteradas ocasiones Reymi Luis Ferreira, ministro de Defensa, señaló que hay una ley que desde 2014 exige que el TAM se convierta en una empresa estatal estratégica, por ello el tema no es nuevo.
En medio de cuestionamientos, el Decreto Supremo 3025 del 18 de diciembre daba un plazo de 45 días para que el TAM se transforme en empresa pública, bajo la estructura orgánica de un directorio, en el cual intervendrán el ministro de Defensa y representantes de los ministerios de Obras Públicas y de Economía.
Luego estarán el comandante de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), el jefe de Estado Mayor y los jefes de los departamentos III (Operaciones) y IV (Logístitico) de la FAB.
Cabe recordar que la anterior estructura solo era militar. Este directorio podrá establecer sucursales, agencias y representaciones en el interior y exterior del país.
En su proceso de transformación, el 27 de diciembre, el viceministro de Defensa, Luis Fernando Aramayo, presentó a Julio César Villarroel, como nuevo gerente general de la Empresa Pública Transporte Aéreo Militar.
Respecto a la readecuación de tarifas, Aramayo indicó que se intentará no subir el precio para continuar con el trato especial a los bolivianos.
Sobre los requisitos para hacer el cambio de una empresa solo militar a una comercial civil, Ferreira sostuvo que no habrá problemas en cumplirlos y que el objetivo es entrar al mercado comercial civil con todos los papeles habilitados.
En cuanto a cómo se irá dando la transformación, Ferreira evitó dar detalles, pero indicó que el tema de la cantidad de aviones es un punto central.
Ferreira considera que el nuevo TAM debe ser una empresa rentable, debe mantener sus finanzas equilibradas, como lo venía haciendo.
Ferreira recordó que la línea militar compró aviones con recursos propios, por lo que no recurrió al Estado.
La autoridad indicó que el TAM tiene por objeto la explotación de servicios de transporte aéreo regular y no regular, nacional e internacional de pasajeros, carga y correo.
Por lo que señaló que ya se iniciaron las negociaciones con BoA para comprar algunos de sus aviones y abrió la posibilidad de alquilar otros para que el funcionamiento de la empresa sea el adecuado y pueda competir en el mercado nacional.
ALA pide más personal en los controles
Para la Asociación de Líneas Aéreas de Bolivia (ALA), los controles del Estado, en los diferentes aeropuertos, deberían estar acompañados de tecnología y suficiente cantidad de personal, particularmente en el caso de Migración, Aduana y la Felcn.
Yanela Zárate, gerenta general de ALA, indicó que el respeto a las normativas vigentes garantiza y garantizará seguridad en el desarrollo de la actividad aeronáutica nacional e internacional tanto para las líneas aéreas como para sus usuarios.
Cuando se le consultó si el caso LaMia iba a tener algún efecto en el sistema aeronáutico del país y en la calificación internacional de los aeropuertos, Zárate señaló que lo sucedido en Colombia es lamentable y que deberá ser investigado hasta establecer responsabilidades, sin embargo, indicó que esto no debe afectar a la actividad como tal.
En cuanto al desempeño de las empresas, a su criterio las compañías desarrollan eficientemente sus actividades cumpliendo la normativa aeronáutica nacional e internacional, lo que garantiza la calidad en la atención a los usuarios.
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