"Las observaciones que nos hacen van por el lado político de la decisión gubernamental de crear una aerolínea y de la forma en que se estaría financiando, que es con el objetivo de democratizar el servicio", explicó Casso.
AeroSur y otras líneas aéreas plantearon observaciones a BoA, en una audiencia pública, argumentando que al ser una aerolínea estatal tendría beneficios especiales en desmedro de sus intereses.
Las compañías privadas aseguran que BoA no es sostenible y será subsidiada con los impuestos de los bolivianos.
"Es una empresa pública que se beneficiará con los recursos provenientes de los impuestos que pagamos todos los privados (…). Con el ingreso de una nueva operadora, tres empresas por lo menos van a quebrar", expresó el gerente general de AeroSur, Carlos Meier.
Casso rechazó estas aseveraciones y aseguró que BoA ha definido una estrategia comercial para ser sostenible.
Explicó que en su Plan de Negocios se prevé que a partir del quinto año de operaciones recuperará el capital de 15 millones de dólares invertido por el Estado.
"Lo que vamos a hacer nosotros es tener una tarifa competitiva”, manifestó.
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