EDUARDO ZABALA | EL EX PILOTO DEL LAB DONDE VOLÓ POR MÁS DE 20 AÑOS, CREÓ EL PRIMER SIMULADOR DE VUELO EN COCHABAMBA. IDEAL PARA ENTRENAR A PILOTOS QUE VUELAN EL BOING 737 NG.
"La idea de crear el simulador de vuelo surge porque yo fui piloto por muchos años, conocí muchos simuladores en todo el mundo y decidí crear uno, aprovechando que soy jubilado.
Fue piloto del Lloyd Aéreo Boliviano por más de 20 años, instructor de vuelo y comandante de varios aviones de la entonces empresa boliviana. Trabajó también en la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional), institución que regula la aviación en América.
“Dejé de volar muy joven y siempre me quedé con ganas de seguir volando pero por cuestiones personales no se pudo”, cuenta el Capitán Zabala.
Fabricar este simulador, fue un desafío para él.
“Poco a poco fui plasmando, investigando y haciendo cursos para poder realizarlo hasta que por fin lo lancé. Ahora solo falta iniciar la certificación para que esté aprobado por la Dirección Aeronáutica y Civil de Bolivia”, explica.
Zabala trabajó aproximadamente dos años creando su simulador de vuelo de Boing 737 NG y tuvo la colaboración del Ingeniero de Sistemas Erick Pozo y un hijo de un colega, suyo el Capitán Pedro Castro.
“Terminé el simulador hace unos días; la cabina que he creado es un poco más moderna que la de los aviones de BOA, tengo otro simulador que es para aviones monomotor y bimotor pequeños para entrenar pilotos y principiantes. Actualmente no hay ninguna aerolínea de vuelo que tenga simuladores en Bolivia”, asegura Zabala.
LOS SIMULADORES DE VUELO
“Hoy en día y desde hace mucho tiempo se usan los simuladores de vuelo para entrenar y poder calificar a los pilotos de todas las líneas aéreas del mundo, ya que entrenar en aviones reales, como se hacía antiguamente, es riesgoso y a la vez costoso; no se pueden simular muchas fallas que se quisiera para una mejor formación de los pilotos en el avión, por cuestiones de seguridad, razón por la que se ha recurrido a crear simuladores”, dice.
“Todos los pilotos de líneas aéreas comerciales y no comerciales, tienen que someterse a un chequeo; los de pilotos de líneas aéreas son más rigurosos, deben someterse cada seis meses a un chequeo práctico en simulador y a otro médico, para ser certificados aptos para continuar ejerciendo la profesión de piloto”, explica Zabala.
Estos simuladores son ideales para entrenar a pilotos. Son ideales también para gente que tiene pánico a volar; puede hacer terapias en simuladores y así perder el miedo. Lo mismo ocurre con jóvenes que no están seguros si quieren estudiar aviación, pueden hacer la prueba antes en un simulador para estar seguros de que esa es su vocación.
“Este simulador es especial para entrenar gente que vuela el Boeing 737 NG, pero se puede entrenar con todo tipo de pilotos. Es similar a todos los Boeing 777, que son los aviones más volados en el mundo hoy en día. También es similar al 767 y 757, pero es específicamente para el Boeing 737.
El otro simulador que tiene Eduardo Zabala está hecho para principiantes y para pilotos que ya son pilotos pero que aún no han entrado a la era del jet. Aquí hacen horas de vuelo y van practicando todo lo que hace un piloto para llevar el avión a destino. Una vez que ya son capaces en este simulador, dan exámenes para una licencia privada, luego comercial y una vez que ya son capitanes pueden pasar al otro simulador el Boeing 737 NG.
“No sólo pilotos pueden probar el simulador, podrían hacerlo estudiantes o cualquier persona para ver cómo se vuela”, dice.
FUNCIONAMIENTO
“Antiguamente los simuladores eran muy costosos; costaban entre dos, tres y cuatro, millones de dólares, porque se necesitaban infraestructuras muy grandes por las computadoras y el manejo de todos los sistemas, porque como su nombre indica, simulan un avión. Es igual a una cabina de avión que con los años ha ido mejorando gracias a la tecnología, hecho que ha permitido que los costos de fabricación se hayan reducido considerablemente”, dice Zabala.
“El mantenimiento es mínimo, otro problema con los simuladores antiguamente era que se necesitaba un plantel de mecánicos, de ingenieros que están las 24 horas ahí, porque un simulador trabaja las 24 horas del día y los 365 días del año, inclusive de noche hay turnos que hacen las líneas aéreas del mundo porque hay mucha demanda. Mantener técnicos e ingenieros, significaba un costo muy elevado; hoy en día este tipo de simuladores requieren un mínimo de mantenimiento, siempre hay problemas con los softwares, pero son fáciles de solucionar”, asegura.
“A parte de la práctica en estos simuladores, podemos fabricar para cualquier persona o empresa que quiera tener uno. Este simulador sirve para varios chequeos de pilotos que se hacen periódicamente, para la selección de pilotos, participar en aeropuertos especiales, entre otros; inicialmente fue hecho como hobby, fue un desafío para mí, pero viendo la acogida de todos los pilotos que no tienen dónde ir para hacer las pruebas que en otros lugares son muy costosas, creo que sería una buena opción si es que logramos certificar con la autoridad aeronáutica; podría servir para todos los jóvenes piloto que quieran comenzar la carrera de aviación”, concluye el ex comandante.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar