lunes, septiembre 23, 2013

Recordando al Lloyd Aéreo Boliviano

El pasado domingo 15 de septiembre, hubiera cumplido 88 años de vida el Lloyd Aéreo Boliviano, la primera línea aérea comercial nacional, creada en 1925 durante el gobierno de Bautista Saavedra, gracias a la iniciativa de la colonia alemana residente en nuestro país.

El gobierno de Bautista Saavedra contrató al Ing. Hans Grether, de nacionalidad alemana, para que efectúe los estudios necesarios para la construcción del ferrocarril Cochabamba – Santa Cruz. El Ing. Grether se dio cuenta de lo difícil de nuestra topografía, y recomendó que el medio más rápido y económico para integrar el país, era el transporte aéreo.

En conocimiento de la recomendación del Ing. Grether, la colonia alemana decidió donar un avión al gobierno boliviano, con la condición de que se cree una línea aérea comercial. La aeronave donada fue un Junkers F-13. Para asesorar en la creación de la línea aérea, la colonia alemana, a través de Guillermo Kylmann, contrató a la Misión Junkers, que tenía su sede en Buenos Aires; esta misión, compuesta por el Ing. Walter Jastram, el piloto Willie Neuhoffen y el técnico Franz Schonmetzler, llegó a Cochabamba por vía férrea transportando el avión desarmado, el mismo que fue luego ensamblado en Cochabamba.

El avión donado fue oficialmente entregado al gobierno boliviano el 16 de agosto de 1925 en El Alto. En esta ceremonia estuvieron presentes el presidente Saavedra y Monseñor Daniel Rivero, quien bautizó la nave con el nombre de “EL ORIENTE”.

El 15 de septiembre de 1925 se fundó el Lloyd Aéreo Boliviano como Sociedad Anónima. En esta ocasión, el Sr. Guillermo Kyllmann, uno de los fundadores del LAB, explicó las ventajas del transporte aéreo. Se determinó que La Paz sería el domicilio legal de la empresa y Cochabamba el centro de operaciones. El primer presidente del LAB fue el Sr. Killman y el Ing. Jastram fue el primer gerente.

Entre 1925 y 1941, la nueva empresa tuvo un constante y firme crecimiento; se importaron aeronaves cada vez más modernas y a tono con el progreso de la aviación en el mundo, tales como: los Junkers W-34 ci, K-43, los trimotores JU-52M, el JU-86 y el avión americano anfibio Sikorsky S38B y el Grumman G-21, también anfibio. Con estas aeronaves, el LAB logró integrar totalmente el territorio nacional, lo que dio lugar también a que el LAB construyera aeropuertos.

Asimismo, mediante convenio con la empresa brasileña “Syndicato Condor” y la “Deutsche Lufthansa”, unieron el pacífico con el atlántico conectando el país con Europa y Estados Unidos.

Durante la guerra del Chaco, de 1932 a 1935, el LAB jugó un papel importante al poner a disposición del gobierno toda su flota y recursos humanos y técnicos.

Durante la segunda guerra mundial y siendo el país aliado de los Estados Unidos, declaró la guerra a Alemania. En 1941 el gobierno nacionalizó el LAB y firmó un contrato de administración con PANAGRA, como consecuencia, los empleados alemanes dejaron de prestar servicios en la empresa.

En esa época, el LAB cambió el material de vuelo, dejó de operar los aviones alemanes y se volcó al mercado americano adquiriendo aviones Lockhhed Lodestar 18-10, Douglas DC-3, DC-4, DC-6B, Boeing B-17, Curtiss C-46, Fairchild C-82.

En la década de los 60 se abrieron las rutas a la mayoría de los países sudamericanos y se realizaron estudios para la modernización de su flota; en septiembre de 1968 llegó el Lockheed Electra L-188 A, avión turbo-hélice que sostuvo la economía de la empresa hasta la llegada del primer jet en marzo de 1970 y en 1969 llegaron los primeros Fairchild. Posteriormente, en rápida sucesión, los B727-200 y los B707-323C.

Los años dorados del LAB fueron de 1968 a 1996, época en la que, con la modernización de su flota, abrió las rutas a Panamá, Miami y Washington; compró aviones cargueros para poder competir en el mercado internacional de carga, capacitó a sus trabajadores involucrados en el despacho de los aviones bajo los estándares de la Federal Aviation Agency (FAA). En 1992 adquirió un avión de última tecnología, el Airbus A-310, con el que efectuó vuelos directos a Miami y vuelos expresos (charter) a Europa.

En esa época el LAB generaba 1.500 empleos regulares y unos 20.000 empleos indirectos; aportaba un porcentaje importante al PIB.
A fines de 1995, el gobierno de Sánchez de Lozada decidió capitalizar las empresas estatales, entre ellas el LAB. En ese momento los ingresos brutos de la empresa eran de aproximadamente 200 millones de dólares anuales, sin recibir ninguna subvención del Estado.

Esta obscura y viciada de nulidades capitalización del LAB, trajo como capitalizador a la empresa brasilera VASP, que ya en su país estaba atravesando una quiebra técnica. Esta mala elección de socio capitalizador fue el inicio de la desaparición del LAB, pues todas las posteriores administraciones se abocaron a medrar de la empresa en beneficio personal con las consecuencias conocidas por todos los bolivianos.

Hay que recordar que gracias a la existencia del LAB, que en momento dado se ocupaba de atender los aeropuertos, las comunicaciones, el tránsito aéreo, el servicio de meteorología e inclusive la confección de reglamentaciones aeronáuticas, se creó la Administración de Aeropuertos (AASANA) y la Dirección de Aeronáutica Civil (DGAC), lo que dio lugar al nacimiento de muchas empresas de carga para atender las necesidades internas.

Este pequeño recuerdo es un homenaje a todos los pilotos, técnicos de diferentes especialidades, tripulantes de cabina, empleados administrativos, quienes con sacrificio y mística, forjaron y engrandecieron al LAB, logrando que este sea reconocido mundialmente por su eficiencia y seguridad. Este homenaje es también para todos aquellos que sacrificaron sus vidas con este fin.

(*) Asociación Boliviana Para La Aeronáutica

1 comentario:

  1. Cada vez que volvíamos a La Paz a visitar a la familia teníamos varias líneas aéreas para escoger, pero prefería el Lloyd, una atención exquisita desde el momento de hacer las reserva de asientos.
    El café Boliviano y los periódicos nacionales ofrecidos apenas sentados.
    La amabilidad y cortesía.
    He volado toda clase de aerolíneas en USA,lejano oriente, medio oriente, África y Europa y ninguna fue en calidad,profesionalidad como Lloyd Aéreo Boliviano.
    Ojala vuelva, un orgullo nacional.

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