El ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, José Kinn, posesionó ayer al gerente y al presidente del directorio de la empresa Boliviana de Aviación (BoA), que tendrá a su cargo la administración y la dirección de la nueva línea aérea estatal.
El gerente de la aerolínea estatal es Ronald Casso y el presidente del directorio es el vicecanciller Hugo Fernández, en representación del Ministerio de Relaciones Exteriores.
La BoA fue creada mediante Decreto 29318 de 24 de octubre del 2007, como una empresa de derecho público, de duración indefinida y con autonomía de gestión administrativa, financiera, legal y técnica. Está bajo tuición del Ministerio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda.
Tras la posesión de las autoridades, Kinn dijo que la creación de esta línea aérea marca un esfuerzo del Gobierno para dotar a Bolivia de seguridad en el tema de la aviación comercial.
Recordó que el conjunto de los ciudadanos son testigos de la crisis e inestabilidad que ha vivido este sector y que afectó directamente a los ciudadanos.
Dijo que estas han sido las razones por las que el Gobierno decidió crear esta empresa estatal.
Según Kinn, la empresa que debió ser fortalecida para garantizar la aviación comercial era la línea bandera Lloyd Aéreo Boliviano (LAB), “pero fue imposible rescatarla y reconducirla”.
Con relación a BoA, dijo que ésta será una empresa con control del Gobierno y señaló que deberá ser una compañía rentable técnica y económicamente.
La posesión del directorio era fundamental para que la empresa empiece a funcionar administrativamente y así continuar los trámites para lograr su Certificado de Operador Aéreo (COA).
AeroSur y su impugnación
La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) hará conocer hoy la respuesta a la impugnación presentada por AeroSur, cuestionando el proceso que permitió la entrega del Certificado de Operación Aérea (COA) a Aerolíneas Sudamericanas (AS).
El director de la DGAC, Javier García, dijo que la respuesta demostrará todo el proceso que se ha seguido para dar la certificación. “Un trámite que dura por lo general cuatro meses se extendió por casi un año y medio porque hemos sido muy exigentes”, manifestó. Dijo que a petición del Estado, la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) envió una experta para analizar el procedimiento y así contar con un informe oficial.
El gerente de la aerolínea estatal es Ronald Casso y el presidente del directorio es el vicecanciller Hugo Fernández, en representación del Ministerio de Relaciones Exteriores.
La BoA fue creada mediante Decreto 29318 de 24 de octubre del 2007, como una empresa de derecho público, de duración indefinida y con autonomía de gestión administrativa, financiera, legal y técnica. Está bajo tuición del Ministerio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda.
Tras la posesión de las autoridades, Kinn dijo que la creación de esta línea aérea marca un esfuerzo del Gobierno para dotar a Bolivia de seguridad en el tema de la aviación comercial.
Recordó que el conjunto de los ciudadanos son testigos de la crisis e inestabilidad que ha vivido este sector y que afectó directamente a los ciudadanos.
Dijo que estas han sido las razones por las que el Gobierno decidió crear esta empresa estatal.
Según Kinn, la empresa que debió ser fortalecida para garantizar la aviación comercial era la línea bandera Lloyd Aéreo Boliviano (LAB), “pero fue imposible rescatarla y reconducirla”.
Con relación a BoA, dijo que ésta será una empresa con control del Gobierno y señaló que deberá ser una compañía rentable técnica y económicamente.
La posesión del directorio era fundamental para que la empresa empiece a funcionar administrativamente y así continuar los trámites para lograr su Certificado de Operador Aéreo (COA).
AeroSur y su impugnación
La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) hará conocer hoy la respuesta a la impugnación presentada por AeroSur, cuestionando el proceso que permitió la entrega del Certificado de Operación Aérea (COA) a Aerolíneas Sudamericanas (AS).
El director de la DGAC, Javier García, dijo que la respuesta demostrará todo el proceso que se ha seguido para dar la certificación. “Un trámite que dura por lo general cuatro meses se extendió por casi un año y medio porque hemos sido muy exigentes”, manifestó. Dijo que a petición del Estado, la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) envió una experta para analizar el procedimiento y así contar con un informe oficial.
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