La empresa francesa Thales cuenta con todos los equipos y personal para comenzar lo antes posible la instalación de al menos 13 radares y un centro de comando en Bolivia, con lo que pretende instalar el sistema de control aéreo más moderno de América Latina.
El vicepresidente de la firma, Rubén Lazo, llegó para reunirse con autoridades de diferentes áreas y aprovechó para informar que el acuerdo comercial firmado el año pasado con Bolivia está casi listo para hacerse realidad.
"El objetivo es dar una cobertura y una visión de control del espacio aéreo boliviano, identificar todos los vuelos que pasan por el país y después tener la vigilancia que identifica los vuelos que son de contrabando. Me gusta decir que fue un proyecto diseñado para las necesidades de Bolivia”, afirmó Lazo.
En noviembre de 2015, Bolivia y Thales suscribieron el contrato que comprometió una inversión de 200 millones de euros (223 millones de dólares). Lazo dijo que el proyecto ya está aprobado y que ahora se espera que el Gobierno firme el financiamiento.
Thales trabajó durante tres años para diseñar el proyecto, técnicos franceses viajaron por todo el país e identificaron los lugares más críticos. "Este trabajo se hizo con autoridades bolivianas”, indicó.
Entre los 13 radares están cuatro de defensa aérea, un radar de vigilancia primaria Star2000 y dos radares de aproximación Banda L que serán producidos en Brasil. Del resto no se tiene información oficial.
El ejecutivo de Thales añadió que al margen de los radares se instalará un centro de control que permitirá integrar toda la información que generen los equipos, analizará los datos y los operadores podrán tomar las decisiones necesarias.
Sistema de capacitación
Junto con la instalación del sistema de punta, Thales implementará un sistema de capacitación, en el que 300 bolivianos recibirán talleres y cursos de todo el procedimiento de control aéreo en el territorio nacional.
"Además, me imagino que muchos de los operadores de la región vendrán a Bolivia a tener esa información. Hoy sabemos que hay controladores, pero como vamos a introducir una nueva tecnología, es prácticamente una carrera profesional, estamos introduciendo 300 personas que irán a Francia y también (aprenderán) en Bolivia”, explicó.
El trabajo que ya comenzó a realizar la empresa Thales la llevó a abrir una oficina en la ciudad de La Paz. De hecho, cuando ya comiencen las fases del trabajo de instalación de los radares se requerirá que técnicos extranjeros lleguen a residir en Bolivia con sus familias.
Pero para Lazo lo más importante de este acuerdo comercial es ayudar a Bolivia con la defensa de su soberanía.
"Como empresa respetamos mucho porque entendemos que el sector defensa es algo donde la soberanía nacional es esencial. Es nuestra obligación que los clientes sean capaces de manejar los sistemas al 100% claro que si hay problemas estaremos a su disposición”, enfatizó.
La firma francesa trabaja actualmente en el "preinicio del proyecto”.
"Sabemos que vamos a contribuir para algo importante de Bolivia y ese tipo de proyectos es controlado a nivel más alto de la empresa. Es un proyecto que no podemos fallar, hay tecnología de punta”, finalizó Lazo.
Presencia de Thales
Bolivia La firma francesa Thales no sólo diseña el sistema de control aéreo en Bolivia, también participó en el diseño y fabricación del Satélite Túpac Katari con varios equipos. Asimismo, se encarga de brindar seguridad en cuentas bancarias.
Región La empresa está presente en nueve países de América Latina y en 20 países del mundo.
América En México, Thales se encargó de implementar el sistema de seguridad en el Distrito Federal (DF), después de meses la criminalidad bajó en un 40%. En Brasil se está por inaugurar un satélite que será lanzado al espacio en algunas semanas. En el país vecino la firma fabrica radares.
El proyecto apunta a generar más turismo
Para el vicepresidente de la empresa Thales, Rubén Lazo, uno de los beneficios de instalar el sistema de control aéreo en Bolivia es que se generará más turismo en el país.
"A partir de que Bolivia tenga un sistema de control aéreo con normas internacionales, muchos más vuelos pasarán por Bolivia, muchas más compañías aéreas tendrán el interés de aterrizar en el país y eso provocará una aceleración de la industria del tráfico aéreo”, afirmó.
Asimismo, Lazo considera que otro beneficio es en la industria aeronáutica. Cuando los aviones atraviesan el espacio aéreo de un país se paga un impuesto, la tasa de vuelo, "que hoy Bolivia no cuenta porque no sabemos qué vuelos ingresan. Ese sistema permitirá crear un ingreso financiero para el país”, señaló.
El trabajo de instalación del sistema de control demandará al menos 30 meses para que los radares estén listos, junto con el centro de control y otros implementos que se necesitan.
Tras una investigación de este medio, en 2014 se estableció que los 38 aeropuertos del país, entre nacionales e internacionales, operan sin radares. Su ausencia constituye un gran riesgo para usuarios y tripulantes por la probabilidad de colisiones, incidentes y accidentes, según expertos.
Actualmente, los operadores deben comunicarse constantemente con los pilotos para evitar accidentes.
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