El ruido originado por las turbinas de los aviones se ha convertido en una molestia constante que afecta la salud de los habitantes de áreas cercanas a los aeropuertos. En El Alto, esta situación se refleja a diario con cada vuelo que llega y que parte.
Los elevados niveles del ruido causan daños en la salud de las personas, como la pérdida de audición y diferentes afecciones psicológicas.
El otorrinolaringólogo Claudio Fernández sostiene que la lesión más frecuente y alarmante que causa la contaminación acústica es la pérdida de la audición a corto plazo.
Fernández explica que los daños que sufren los oídos dependen de la intensidad del sonido a la que están expuestos. El intenso ruido puede provocar la ruptura de la membrana timpánica en el oído medio -órgano que recibe la vibración del sonido- y provocar hipoacusias neurosensoriales (lesiones).
“Si el ruido es superior a 60 decibeles daña a las células ciliadas, encargadas de recibir el impulso bioeléctrico para transportarlo hasta el cerebro. La lesión fuerte ocasiona que estas células se dañen y se tenga una pérdida definitiva de la audición” afirma el especialista.
Así, las personas que sobrepasan el nivel del ruido permitido, tienden a sufrir lesiones a partir de los 40 años y son propensos a utilizar audífonos a los 50.
Las consecuencias de esta clase de contaminación también se reflejan en el aspecto psicológico de las personas, por un lado interfiriendo en el ciclo normal del sueño, causando insomnio y estrés, y por otro alterando el sistema nervioso con cambios en la presión arterial, trastornos gastrointestinales, úlceras y otros.
120 dB (decibeles, unidad que mide la intensidad sonora) es el máximo nivel de ruido permitido para los motores del avión y 88 el mínimo, de acuerdo con la escala sonora estipulada en el reglamento de la Organización Aérea Civil Internacional (OACI), en el anexo 16 referido a la contaminación ambiental.
Por otro lado, la Organización Mundial de la Salud establece que el ruido normal que puede llegar a tolerar un ser humano, oscila entre 50 y 60 decibeles. Arriba de estos rangos, el ruido provoca daños al sistema auditivo.
Por su parte, el especialista en motores aeronáuticos Marco Antonio Lazarte sostiene que “la contaminación del ruido es más nociva que la contaminación de gases residuales que expulsan los motores del avión”.
Los afectados
Villa Alemania, Mercedario, Loreto, Calama, San Luis Tasa -pertenecientes al Distrito 3 de la urbe alteña- forman parte de las zonas afectadas por la polución sonora. Desde la creación del Aeropuerto Internacional de El Alto en 1994 (hasta 1999 denominado John F. Kennedy) los habitantes de estos barrios viven sometidos a ruidos continuos que los obligan a mantenerse en sus habitaciones.
Germán Condori, vecino de Villa Alemania, sostiene que “los días que estoy en casa, trato de no salir mucho al patio, prefiero quedarme en mi cuarto porque el sonido de los aviones me molesta demasiado”.
[CMSDataProperties.LoadTransformation]: Transformation 'gsi.gn3quote.P7QuoteList' not found. Cada media hora, aproximadamente, centenares de habitantes -que forman parte del total de los 1,2 millones de personas que viven en El Alto- deben soportar la resonancia de las turbinas de los 83 vuelos que parten del aeropuerto, según el itinerario de vuelos del Servicio de Aeropuertos Bolivianos (SABSA), alterando con cada uno de ellos el ambiente sonoro de la urbe.
Sin embargo, la necesidad de contar con una casa propia tiene muchas veces más importancia que el derecho a la salud. “El ruido se ha vuelto una costumbre. A veces ya no sentimos nada. Nos tenemos que aguantar, no tenemos dónde más ir a vivir”, comenta doña Julia Cañaviri, vecina de la zona de Calama por más de 20 años.
Según los vecinos, la presión del sonido influye incluso en la construcción de las viviendas. Algunas de ellas han sufrido rajaduras en las ventanas y tumbados.
Ante esta situación, el vecino Condori, de Villa Alemania, sostiene que se hicieron las gestiones para solucionar este problema con el aeropuerto. No obstante, las autoridades nunca les dieron una respuesta.
Protagonistas y normas
Las aerolíneas que operan en el país, como Aerosur, BOA, TAM, Aerocom, Amazonas, American Airlines, TACA y otras, tienen aviones cuyas turbinas generan esta contaminación. Modelos como el BAE-146-200, C-21, o el Boeing 727 y 737 provocan mayor contaminación residual y acústica y todos sobrepasan el nivel estipulado por la norma internacional, de 120 decibeles.
Los aviones utilizados por las compañías tienen motores de pistón, turbohélice y de reacción. “Los motores que generan mayor contaminación de residuos son los de pistón; en cambio, los motores que generan mayor contaminación acústica son los turbohélice y los motores de reacción” asegura Lazarte.
En el país no existe una reglamentación clara y objetiva respecto a la contaminación acústica aérea. La normativa boliviana, basada en Reglamento Aeronáutico Boliviano y supervisada por la Dirección General de Aeronáutica Civil, no estipula en ningún punto la contaminación generada por los motores de los aviones. La Ley del Medio Ambiente 1333, del 27 de abril de 1992, sólo regula el ruido en calles, discotecas y otros lugares de diversión.
El Gobierno Autónomo Municipal de El Alto y la Dirección de Medio Ambiente, encargados de esta problemática, aún trabajan en una reglamentación en la que incorporarán estos aspectos, según informó el encargado de contaminación acústica, Hugo Mamani.
“Vivir bien” es la consigna del Gobierno boliviano y esta realidad exige una pronta solución al problema y una reglamentación para regular, en todos sus componentes, la aeronavegación en el país.
Niveles de ruido
# Acústica La contaminación del ruido es más nociva que la contaminación de gases residuales. El ruido del avión sobrepasa los 125 dB.
# Término El decibel es la unidad utilizada para medir el nivel de potencia y el nivel de intensidad del ruido.
# Tolerable Datos de la OMS establecen que la persona puede someterse a ruidos no mayores a 60 dB, lo que equivale a sostener una conversación normal.
# Norma Nuestro país carece de reglamentación objetiva respecto al tema.
# Daños Existen dos tipos de efecto que causa el ruido:
# Fisiológicos auditivos La pérdida total o parcial de la audición a partir de los 40 años.
# Fisiológicos no auditivos Alteraciones del sistema nervioso ocasionando el aumento de la presión arterial, úlceras, etc.
# Psicológicos El ruido altera el ciclo normal de sueño, puede causar insomnio y estrés, y tiene efectos negativos en la retención de memoria.
# Vecinos Al menos 6 barrios de El Alto son alterados por el ruido de los despegues y aterrizajes de los 83 vuelos diarios que registra el Aeropuerto de El Alto.
# Pago Según un artículo publicado en el diario español El País, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero indemniza a los ciudadanos que residen cerca de los aeropuertos y que soportan los ruidos.
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