Un aeropuerto sin aviones, el viraje del Juana Azurduy

PROPIETARIO

Respecto al derecho propietario del antiguo aeropuerto, el Jefe de AASANA afirma que es esa administradora la que lo tiene; mientras desde la Gobernación aseguran que según documentos en Derechos Reales, les pertenece.

El Juana Azurduy sin aviones es por el momento un aeropuerto castigado, sin embargo se espera que en un futuro cercano la actividad aérea sea más intensa, una vez que la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) formalice su permanencia en esta terminal.

El ex aeropuerto de la Capital del país es ocupado actualmente por una compañía de la unidad militar del Grupo Aéreo de Caza 67 de la Fuerza Aérea Boliviana que resguarda las 120 hectáreas de la propiedad compuesta por la infraestructura de la terminal aérea, la pista y sus alrededores, mientras espera la transferencia del aeródromo.

Ante la interrogante de qué sucederá con la antigua terminal aérea de Sucre, es un hecho que continuará siendo un aeropuerto constituyéndose en pista alterna o de emergencia al de Alcantarí que le permita mantener su categoría de internacional.

“El Juana Azurduy de Padilla va a seguir funcionando como pista auxiliar de Alcantarí”, aseveró el secretario de Obras Públicas del Gobierno Autónomo Departamental de Chuquisaca, Carmelo Valda, mencionando como ejemplos los aeropuertos de El Trompillo de Santa Cruz, la segunda pista que tiene el aeropuerto de Cochabamba e incluso el de Oruro, que sería la pista alterna de la terminal aérea de El Alto.

Por su parte, el jefe de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (AASANA) del Aeropuerto de Alcantarí, Ramiro Juanes, dijo que todo el servicio de tránsito aéreo para un aterrizaje seguro en el Juana Azurduy es operado desde el nuevo aeródromo.

Un ejemplo de su servicio alternativo es el caso suscitado hace dos semanas, cuando una avioneta aterrizó en el aeropuerto antiguo para evacuar a un ciudadano del Chaco chuquisaqueño con una lesión de columna que necesitaba atención médica especializada.

Actualmente no hay ninguna avioneta en la pista. Las dos unidades destinadas al aeropuerto Juana Azurduy de Padilla de Sucre se encuentran en mantenimiento en Cochabamba. Se trata de un Piper Seneca Bimotor de industria brasilera con capacidad de cuatro pasajeros y un Cessna 206 monomotor turbo para transportar igualmente a cuatro pasajeros.

El comandante de la Segunda Brigada Aérea de la FAB, Juan Carlos Rocha, que desde Cochabamba está a cargo de la parte operativa del viejo aeropuerto de Sucre, dijo a CORREO DEL SUR que las responsabilidades y competencias estarán definidas una vez que haya concluido el proceso de transferencia de comodato.

Por lo pronto las gestiones se están realizando en la ciudad de La Paz entre el Ministerio de Defensa, la AASANA y la Gobernación de Chuquisaca que sería propietaria del aeropuerto.

¿De quién es el aeropuerto Juana Azurduy?
Con relación a la propiedad del antiguo aeropuerto, el Jefe de AASANA, quien actualmente desempeña sus funciones desde el aeropuerto de Alcantarí, afirma que es esa administradora la que tiene el derecho propietario sobre el aeropuerto Juana Azurduy de Padilla.

Incluso comenta que tuvieron dificultades con vecinos que avasallaron el “cerro cortado” realizando allí construcciones irregulares y que hubo algunos comentarios de que entrarían a terrenos del aeropuerto, razón por la cual se vio como lo más conveniente entregar el aeropuerto temporalmente a la FAB para resguardar esta propiedad.

Igualmente y sin tener el dato preciso, Juanes indicó que una parte de las 120 hectáreas del aeropuerto serían de la Gobernación.

Por su parte, el Secretario de Obras Públicas de la Gobernación defendió que según documentos en Derechos Reales, el aeropuerto Juana Azurduy de Padilla es del Gobierno Autónomo Departamental de Chuquisaca, que transfirió su administración a AASANA, pero los terrenos siguen siendo de la institución departamental.

Si bien la naturaleza jurídica de AASANA, según el Decreto Ley Nº 12965 de 1975, indica que está catalogada como institución pública descentralizada con personería jurídica de derecho público, con patrimonio propio y autonomía de gestión administrativa, legal y técnica; es el Ministerio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda quien tiene tuición sobre ella.

Para escuela de pilotos
La propuesta formulada hace un año por el comandante de la Fuerza Aérea Boliviana, el general Juan Gonzalo Durán, para montar en Sucre un Liceo Militar de Aeronáutica continúa vigente.

De transferirse el aeropuerto Juana Azurduy de Padilla y alrededores a la FAB, esta institución militar podría levantar infraestructura adecuada para formar pilotos y técnicos en Sucre.

Sin embargo se deben tomar acciones para que el aeropuerto Juana Azurduy continúe operable pues tal como observó la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) hace ya un año atrás, los “obstáculos” que hay alrededor de la pista, incluyendo las edificaciones que se permiten construir, impedirían un óptimo y seguro funcionamiento de la terminal aérea.

Desde la Gobernación el tema del eropuerto Juana Azurduy de Padilla, aún no se ha visto a fondo, pues esperan en los siguientes días concluir el trámite administrativo que implicó el inicio de vuelos en Alcantarí para volcar su atención a la antigua terminal, indica Valda.

“Estamos en análisis para ver si la Fuerza Aérea pone una escuela de aviación o se queda como aeropuerto presidencial”,, dijo.

Por su parte, Juanes opinó que pocos tripulantes, técnicos y operadores aéreos son de Chuquisaca y que sería muy bueno que haya formación aeronáutica en esta ciudad a la que puedan acceder las nuevas generaciones.

SERVICIO EN LA CAPITAL
La Fuerza Aérea Boliviana tiene presencia en Sucre desde hace tres años

Antes de mayo de 2016, justo cuando el nuevo aeropuerto de Alcantarí comenzó a operar, estaban provisoriamente instalados en una infraestructura que la Gobernación les había dado en comodato en La Madona.

Actualmente la compañía de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), compuesta por más de 40 soldados y alrededor de 30 miembros del personal, ocupan los predios del antiguo aeropuerto Juana Azurduy de Padilla (JAP) con el fin de resguardar sus instalaciones y con la expectativa de que este aeródromo les sea transferido de manera oficial.

El aeropuerto luce diferente. Desde la entrada a la que ahora es una unidad militar, los civiles no pueden ingresar regularmente. La presencia de efectivos realizando el control de oficiales vestidos de azul entrando o saliendo, es ahora habitual. Los jardines no se han regado en todo el invierno y el pasto luce mustio.

Lo que era el área destinada a los mostradores de las líneas aéreas ahora está vacía. La sala de ingreso de pasajeros y entrega de maletas es el dormitorio de los soldados que hacen su servicio militar, y la cocina y el comedor están destinados a preparar y servir los alimentos de la mencionada compañía de soldados.

No hay ningún avión en la pista de aterrizaje.

Esta unidad de las Fuerzas Armadas de Bolivia, acantonada en el antiguo aeropuerto, espera dar a conocer las acciones cívicas que cumple, por ejemplo evacuando enfermos o personas en riesgo, reconociendo hitos fronterizos, apoyando actividades de la sociedad civil o brindando ayuda social a la comunidad.

Recientemente, los soldados apoyaron las campañas antirrábicas que se realizan en la ciudad y la de apoyo denominada “Un abrigo para un amigo”, en la que casa por casa recogieron ropa de invierno destinada a los más necesitados.

Igualmente, en coordinación con la Alcaldía y la Gobernación, respaldan actividades deportivas o de salud.

En la actualidad, la Fuerza Aérea Boliviana está en fase de reclutamiento de 2ª temporada para que jóvenes mayores de 18 años y menores de 22 hagan su servicio militar. Los interesados pueden aproximarse al antiguo aeropuerto portando su carnet de identidad.
El teléfono de contacto para emergencias es el 67600556.