Desde la gestión 2006, el flujo aéreo en la ciudad de Tarija va en crecimiento. En los últimos años las personas optaron por viajar más en aerolíneas aéreas, datos que pueden ser certificados a través del registro que maneja la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (Aasana).
En la gestión 2006 se registró un tráfico aéreo de 45 mil personas, la cifra ascendió a 121.570 personas en la gestión 2012. Y en lo que va del año 2013, el flujo aéreo ya superó las 145 mil personas que viajaron en avión. Eso significa que en ocho años el tránsito aéreo aumentó en un 222 por ciento (%).
El jefe de Aasana, José Barrios informó que el pico más alto del tráfico de pasajeros es el mes de enero, mismo que baja gradualmente hasta junio y nuevamente comienza a subir.
En 2006 se tenía un registro de 45 mil personas que salían y llegaban al departamento por el Aeropuerto. Al año siguiente, la cifra aumentó en un 25%.
Mientras que en la gestión 2012 se tuvo un tráfico de pasajeros de 121.570, sin embargo, este tendió a crecer, ya que de enero a la fecha se tiene un registro de 123.596 personas que viajaron en las diferentes aerolíneas. Se estima que hasta fines de gestión se alcanzará al menos los 145 mil pasajeros.
Cuando se construyó el Aeropuerto estaba proyectado hasta el 2020. Pero nadie se imaginó el crecimiento poblacional que registra la ciudad y la demanda de vuelos, razón por la cual el Oriel Lea Plaza cada vez se encuentra más saturado.
Desde la percepción de Barrios, las personas optan por usar más el transporte aéreo, ya sea por la seguridad de llegar al destino y por los costos accesibles de los pasajes.
De acuerdo al jefe de Aasana, la capacidad de atención que tienen las salas de preembarque es de 200 pasajeros, pero existen ocasiones que esa capacidad queda rebasada debido a que las aerolíneas tienen horarios similares de vuelo.
“Los días críticos son los domingos y el viernes, cuando en el lapso de una hora tengo seis vuelos que llegan –mencionó Barrios– normalmente entre las 16.30 a 17.30 están llegando todos los aviones o están saliendo”.
Trabajos
Aasana, de manera conjunta con la Gobernación, trabaja en la modernización del Aeropuerto, a través de un proyecto que contempla la ampliación de las salas de preembarque, plataforma, ampliación de la pista. Esos trabajos, a decir de Barrios, deberán estar contemplados en el estudio integral Técnico, Económico, Social y Ambiental (TESA). A partir del 2014 el proyecto deberá ser licitado para iniciar con los trabajos que son necesarios por el colapso de la terminal aeroportuaria. Esta nueva ampliación debe proyectar la funcionalidad del aeropuerto hasta 2030.
Con respecto a la pista del Aeropuerto Oriel Lea Plaza, ésta cumplió su ciclo de vida. Lleva funcionando hace 33 años, cuando lo aceptable es que sólo tenga una vida útil de 20 años.
Sobre el tema, el director de Infraestructura de la Gobernación, Eduardo Miranda, señaló que el proyecto para la refacción de la pista del Aeropuerto se encuentra en la Secretaría de Hacienda a la espera de los anticipos económicos.
Anticipó que el trabajo iniciará el 15 de diciembre. Consiste en la reparación de los laterales de la pista para realizar el control de erosión y evitar que la plataforma se deteriore. Este trabajo demanda una inversión de 5 millones de bolivianos.
También indicó que se realiza el estudio TESA para ampliar la pista, pero no se contempla una ampliación de la terminal de pasajeros.
En la capital opera la aerolínea Boliviana de Aviación (BOA), Transporte Aéreo Militar (TAM), Amaszonas, Aerocom y en los próximos días iniciará sus servicios Ecojet.
elAPUNTE
La construcción de un nuevo aeropuerto es incierta
Aasana no tiene nada oficial para iniciar los estudios de vientos para que en lo futuro se construya un nuevo Aeropuerto. Si los actuales terrenos son de 112 hectáreas, lo ideal para una nueva infraestructura es al menos un espacio disponible de 115 hectáreas.
Barrios aclaró que a más altitud, mayor es la cantidad que se requiere para emplazar una pista y viceversa si este es ubicado en un lugar bajo.
“Los estudios de viento ya se están iniciando, debido a que nosotros tenemos dos torres de viento, los cuales no están facilitando esos datos”, dijo textualmente Miranda.
Pero los estudios de viento de manera coordinada recién iniciarán en la gestión 2014. Dichos estudios pueden demorar hasta cinco años o más.
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