El avión El Paitití del Lloyd Aéreo Boliviano (LAB) voló de Brasil a Malasia con una matrícula falsa de Estados Unidos, así lo comunicó la Agencia Federal de Aviación (FAA) a la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), la entidad nacional conminó a la compañía que traiga de retorno la aeronave al país, pero todavía no hay solicitud para el vuelo especial.
La aeronave con matrícula boliviana CP-2313 salió de Brasil con el número de registro N730CS de Estados Unidos, sobre este punto la FAA informó a la DGAC que “esta matrícula ha sido usada fraudulentamente”, aseguró el inspector de Aeronavegabilidad, Rodolfo Mora.
El Boeing 737-300, bautizado como Paitití, “nunca fue registrado en Estados Unidos y la FAA tampoco ha aprobado ningún programa de mantenimiento”, señaló el secretario General de la DGAC, Marcelo Maldonado.
La DGAC “ha solicitado información a la FAA porque el Paitití estaba operando con una november”, matrícula que representa a Estados Unidos, indicó Maldonado.
Ambas autoridades coincidieron al indicar que esta acción dolosa está bajo investigación por parte de la FAA, de acuerdo con la nota que la autoridad estadounidense envió al país el 30 de julio, en la que comunica que “el número de registro N730CS está en calidad de reserva y que no está asignado a una aeronave en particular”.
CONMINADO A RETORNAR
El único vuelo que puede realizar el Paitití es el de retorno a Bolivia, para lo cual el LAB deberá solicitar expresamente una licencia de viaje especial, conocido como “vuelo ferry” en la jerga aeronáutica, según señaló el director de la DGAC, Carlos Antelo.
Una vez comprobada la ubicación del avión, la DGAC mandó dos notas al LAB, el 14 de julio y el 19 de agosto, y “le conmina a que debe regresar la aeronave El Paitití a Bolivia, a la fecha no tenemos respuesta del LAB sobre las solicitudes” que debe realizar la aerolínea para la licencia de “vuelo especial”, aseguró Maldonado.
REGISTRO BOLIVIANO
La DGAC no dio curso a la anulación de la matrícula CP-2313, lo que fue solicitado por el LAB en junio, porque el avión está bajo jurisdicción judicial, puesto que el Juzgado de Partido Primero de Trabajo y Seguridad Social de Cochabamba “prohíbe” cualquier contrato sobre la aeronave, entonces la Dirección Aeronáutica sólo cumple el mandato.
A pesar de esa negativa, el LAB aseguró que el avión salió de Brasil con matrícula N730CS, con lo cual, en mayo se aseguró que el Paitití tenía doble matriculación, la boliviana y la estadounidense, lo que en julio fue desmentido por la FAA.
Por la orden legal que pesa sobre El Paitití, la DGAC no dio curso al desregistro del avión y “mientras el juez no determine otra cosa y no nos notifique, todo lo que ha determinado el juez, nosotros tenemos que cumplir”, puntualizó Maldonado.
En carta del 13 de agosto, la Dirección de Aeronáutica de Malasia informó a la DGAC nacional que “la supuesta empresa que había dado un anticipo por un contrato quería hablar con nosotros, pero no podemos, porque es una relación contractual entre privados”, remarcó el Secretario General.
La aeronave con matrícula boliviana CP-2313 salió de Brasil con el número de registro N730CS de Estados Unidos, sobre este punto la FAA informó a la DGAC que “esta matrícula ha sido usada fraudulentamente”, aseguró el inspector de Aeronavegabilidad, Rodolfo Mora.
El Boeing 737-300, bautizado como Paitití, “nunca fue registrado en Estados Unidos y la FAA tampoco ha aprobado ningún programa de mantenimiento”, señaló el secretario General de la DGAC, Marcelo Maldonado.
La DGAC “ha solicitado información a la FAA porque el Paitití estaba operando con una november”, matrícula que representa a Estados Unidos, indicó Maldonado.
Ambas autoridades coincidieron al indicar que esta acción dolosa está bajo investigación por parte de la FAA, de acuerdo con la nota que la autoridad estadounidense envió al país el 30 de julio, en la que comunica que “el número de registro N730CS está en calidad de reserva y que no está asignado a una aeronave en particular”.
CONMINADO A RETORNAR
El único vuelo que puede realizar el Paitití es el de retorno a Bolivia, para lo cual el LAB deberá solicitar expresamente una licencia de viaje especial, conocido como “vuelo ferry” en la jerga aeronáutica, según señaló el director de la DGAC, Carlos Antelo.
Una vez comprobada la ubicación del avión, la DGAC mandó dos notas al LAB, el 14 de julio y el 19 de agosto, y “le conmina a que debe regresar la aeronave El Paitití a Bolivia, a la fecha no tenemos respuesta del LAB sobre las solicitudes” que debe realizar la aerolínea para la licencia de “vuelo especial”, aseguró Maldonado.
REGISTRO BOLIVIANO
La DGAC no dio curso a la anulación de la matrícula CP-2313, lo que fue solicitado por el LAB en junio, porque el avión está bajo jurisdicción judicial, puesto que el Juzgado de Partido Primero de Trabajo y Seguridad Social de Cochabamba “prohíbe” cualquier contrato sobre la aeronave, entonces la Dirección Aeronáutica sólo cumple el mandato.
A pesar de esa negativa, el LAB aseguró que el avión salió de Brasil con matrícula N730CS, con lo cual, en mayo se aseguró que el Paitití tenía doble matriculación, la boliviana y la estadounidense, lo que en julio fue desmentido por la FAA.
Por la orden legal que pesa sobre El Paitití, la DGAC no dio curso al desregistro del avión y “mientras el juez no determine otra cosa y no nos notifique, todo lo que ha determinado el juez, nosotros tenemos que cumplir”, puntualizó Maldonado.
En carta del 13 de agosto, la Dirección de Aeronáutica de Malasia informó a la DGAC nacional que “la supuesta empresa que había dado un anticipo por un contrato quería hablar con nosotros, pero no podemos, porque es una relación contractual entre privados”, remarcó el Secretario General.
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