sábado, agosto 05, 2017
Postergan la audiencia contra ejecutivo de Ecojet
La audiencia de medidas cautelares del gerente general de la aerolínea Ecojet SA, Linder Delgadillo, que tenía que llevarse a cabo el 3 de agosto, se suspendió y fue fijada para el 18 de septiembre. El ejecutivo es acusado de alterar documentos de una aeronave alquilada para registrarla como parte de la firma ante la Aduana Nacional y la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).
Según la denuncia, Ecojet arrendó tres aeronaves a la empresa alemana Flair Aviation GMBH en 2013, pero ante el supuesto incumplimiento de pagos, esta le comunicó a Ecojet que había vendido y cedido las aeronaves a la empresa panameña Albo Jet, en 2015.
El representante legal de Albo Jet, Marco Antonio Justiniano, inició el proceso penal en contra de Delgadillo, porque este supuestamente había registrado uno de los aviones como propiedad de Ecojet.
Delgadillo, en una entrevista con EL DEBER, aclaró que la empresa compró el avión bajo la modalidad del leasing financiero y que se realizó el pagó al 100% a Flair Aviation, a través de entidades financieras nacionales y cuenta con todos los sweet bancarios para certificar los pagos de la aeronave.
"La firma panameña sentó la denuncia señalando que compró el avión. Además, una empresa que vende dos veces una cosa, en realidad hace estelionato, el proceso debería ser contra la alemana, acá hay otros intereses", dijo Delgadillo.
Delgaillo asegura que Ecojet ha realizado el pago correspondiente a la Aduana para la nacionalización del avión y lamenta que esta situación afecte la imagen de la firma que cuenta con más de 400 trabajadores.
Justiniano dijo: “Si fuera así él no estaría acusado. Estamos en puertas del juicio oral. En todo este tiempo (desde el 27 de abril de 2015), este señor ha ido evadiendo la justicia valiéndose de chicanerías”.
Justiniano explicó que Delgadillo contó con la ayuda de un exdirector de la DGAC para registrar el avión a nombre de Ecojet. “Ahora que conocen el caso, la DGAC se ha convertido en parte coadyuvante”, expresó.
EL DEBER trató de comunicarse con la DGAC para confirmar la información, pero hasta el cierre de edición no contestaron.
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