“De mi libre voluntad sin que medie dolo, presión o vicio de consentimiento, doy en donación y enajenación a título gratuito, a favor del donatario, la estructura de trenes de aterrizaje, asientos, sistema de aeronave”, señala el contrato, mostrado por el comandante actual de la FAB, Gonzalo Durán.
Desde EEUU, Humberto Roca, dueño de la aerolínea AeroSur, que operaba la nave desde 2010, dijo desconocer el pacto de donación. “El avión era totalmente utilizable. Yo nunca di permiso, ni permití que aviones de AeroSur sean canibalizados (desarmados), pintados o utilizados para otros operadores”, aseguró en un contacto con EL DEBER.
AeroSur fue intervenida por la Fiscalía el 2012. La Fiscalía inició una investigación por presunto delito de enriquecimiento ilícito, evasión fiscal y estafa
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