miércoles, abril 16, 2008

Informe dice que avión caído del LAB tenía poco jet fuel

A los dos meses y medio del aterrizaje forzoso de un avión 727-200 del Lloyd Aéreo Boliviano (LAB), el Gobierno confirmó ayer que la nave no tenía suficiente combustible para viajar en la ruta La Paz-Cobija y que la tripulación incumplió disposiciones internas de la compañía, las que no precisó.

El viceministro de Transportes, José Kinn, explicó a La Prensa que la información forma parte del reporte oficial elaborado por la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), autoridad técnica del sector, y que fue admitido por su despacho.

“El informe establece varios puntos. Ratifica algunos aspectos que ya fueron observados, entre ellos, el combustible. Se evidencia que no hubo las previsiones suficientes. Para ser más explícito, decía que al llegar (a Trinidad) éste era tan poco que al levantar la trompa del avión para aterrizar, la bomba no pudo inyectar combustible a las turbinas y, por tanto, éstas se apagaron”.

“Los demás —agregó— son puntos respecto de la observación de determinadas normas, manuales propios de la empresa, otros de la DGAC, sobre todo son aspectos administrativos. No se cumplieron algunos de los mismos manuales de la empresa”.

El 1 de febrero, el avión del Lloyd que cumplía un vuelo chárter (no regulado, que se rige sin un itinerario) hacia Pando, contratado por Transportes Aéreos Militares (TAM), tuvo que cambiar de ruta y descender de emergencia a dos kilómetros del aeropuerto Jorge Henrich, de Trinidad, capital de Beni. La nave trasladaba a 157 personas, incluidos los miembros de la tripulación. Todas resultaron ilesas gracias a la pericia del piloto Roberto Lobo, quien es uno de los trabajadores más antiguos de la línea. En la maniobra se quebraron las dos alas de la nave y los vidrios.

El reporte preliminar de la DGAC dio cuenta de que el hecho se produjo por la supuesta falta de combustible en el avión.

Kinn dijo que por el resultado del informe, la aerolínea será sancionada. “Tengo que reunirme con la DGAC para pedir algunas aclaraciones y, en función de eso, veremos qué acciones vamos a tomar”.

La cita debía realizarse ayer, pero fue postergada para hoy.

El líder de la Federación de Trabajadores del LAB, Gustavo Viscarra, declaró que la empresa desconocía el informe, pero una vez que lo reciba el departamento legal dará a conocer una posición.

La Superintendencia de Transportes informó que no dará una versión hasta que reciba el documento y lo analice.

En su momento, el Directorio Ejecutivo del LAB descartó problemas de carburante y responsabilizó a los funcionarios de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares para la Navegación Aérea (AASANA), que tienen a su cargo la torre de control de la terminal aérea de Cobija, por dar supuestas malas indicaciones para aterrizar.

El Directorio aseguró que los problemas climáticos también incidieron.

El LAB dejó de operar desde este incidente. Actualmente está habilitada para vuelos chárter, pero no tiene permiso para reanudar los comerciales.

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