El contrato por el mantenimiento de una aeronave entre la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) y la empresa LaMia Corporation, suscrito en 2014, no está notariado, según se desprende de la demanda iniciada por la unidad militar el 16 de agosto de 2016 contra el representante legal de la aerolínea, Gustavo Vargas, el Juzgado Civil Comercial No. 13.
La existencia de la demanda de “emplazamiento” fue confirmada ayer por el Tribunal Departamental de Justicia a través de un comunicado.
El sábado, la FAB informó que inició un proceso civil por incumplimiento de contrato. Entonces, el comandante de la FAB, Celier Aparicio, aseveró que LaMia tenía cuentas pendientes por un avión, de código Avro RJ85, que fue inspeccionado.
De acuerdo a los antecedentes del proceso dados a conocer ayer, a través de un comunicado del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba a requerimiento de este medio, el gerente general del Servicio de Mantenimiento Aéreo Nº 2 de la FAB, coronel Alfredo Cuellar Mercado, firmó un contrato de prestación de servicios con el representante legal de la empresa
LaMia Corporation S.R.L, Gustavo Vargas Gamboa, el 1 de septiembre de 2015. Sin embargo, el documento no tiene reconocimiento de firmas.
Ante ello, el 30 de septiembre de 2016, el Juzgado Civil Nº 13 donde ahora radica el proceso, efectivizó una orden de citación al representante legal de LaMia en el departamento de Santa Cruz. A pesar de ello, “hasta la fecha el emplazado no se presentó”, según el comunicado del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba.
De acuerdo a especialistas en la temática, el emplazamiento “no es un demanda”. También observaron que la FAB haya esperado dos años para iniciar este trámite.
Actualmente, dos aviones de LaMia permanecen en uno de los hangares de la FAB y, según declaraciones anteriores de Aparicio, pagan un monto como alquiler para permanecer en esos ambientes. No precisó el monto.
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