La compañía aérea Air France fue condenada el jueves a 10.000 euros de multa por haber discriminado a una pasajera, militante propalestina, obligada a desembarcar de un avión con destino a Tel-Aviv so pretexto de que no era judía.
El tribunal de Bobigny (periferia de París) declaró a Air France culpable de discriminación y la condenó a pagar 3.000 euros de indemnización por daños y perjuicios a la pasajera y sus gastos de abogado, además de la multa de 10.000 euros. Horia Ankour, alumna de enfermería, quería viajar a Israel el 15 de abril de 2012 para participar en la operación "Bienvenido a Palestina", organizada por militantes propalestinos, a la casi totalidad de los cuales las autoridades israelíes impidieron entrar al país.
Cuando el avión se disponía a despegar de Niza (sudeste de Francia), un funcionario de Air France preguntó a la pasajera si tenía un pasaporte israelí. Ante su negativa, se le preguntó si era judía. Ella respondió que no y tras ello fue obligada a bajar del avión. Durante el proceso, la fiscalía consideró que se trataba de una "discriminación caracterizada".
"No podemos tolerar ese tipo de comportamiento" en Francia, consideró el fiscal. "Hoy te preguntan si eres judío, mañana si eres musulmán y pasado mañana si eres homosexual o adherente de un sindicato", argumentó.
Un empleado de Air France explicó en el proceso que la compañía "sabía que la pasajera no podía entrar" a Israel, porque su nombre figuraba en una lista de personas indeseables establecida por las autoridades israelíes.
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