sábado, octubre 01, 2011

¡Ayúdenme por favor, nos hemos estrellado! mensajeó Minor Vidal

Minor Vidal, de 35 años, es el único sobreviviente de un accidente aéreo que segó la vida de ocho ocupantes el 6 de septiembre cerca de Trinidad. Después de tres semanas de recuperación habló ayer a la prensa. Reveló que lo primero que hizo, después de que el avión se estrelló, fue enviar un mensaje de texto a su esposa Mariela Llanos: “¡Ayúdenme por favor, nos hemos estrellado!” Ese mensaje se convirtió en una esperanza de vida.

Minor ingresó a la sala de prensa del Hotel Regina sujetando la mano de su esposa, acompañado de su hermano Iván Vidal y del personal de la aerolínea de Aerocon.

Sus pasos fueron pausados, posiblemente por el dolor de su espalda y las costillas. Al tomar asiento en el sillón hizo una sutil mueca de dolor. Hace un par de días dejó de usar cabestrillo. Su mirada irradiaba paz.

Minor vivió una odisea luego que la nave se estrelló, pues tuvo que luchar por su vida antes de ser rescatado por los Diablos Azules de las Fuerzas Armadas, en Laguna Brava de Trinidad.

La travesía que vivió en la selva durante casi tres días y los 14 días de internación en la Clínica Los Olivos influyeron para que pierda 10 kilos de peso. Sus heridas ya sanaron, en especial la más visible, la que está en el lado superior derecho del ojo.

Si no fuera por esa cicatriz, no quedaría una huella visible que testifique el accidente aéreo al que sobrevivió. Vidal refleja serenidad en la mirada y asegura ser “un milagro” y “una bendición de Dios”.

Las primeras palabras de Vidal fueron de agradecimiento a las instituciones públicas y privadas que colaboraron en su rescate, a los medios de comunicación por informar de los sucesos, pero sobre todo a Dios, porque es el único sobreviviente del siniestro aéreo.

“Si Dios ha querido dar un mensaje, ése es el mensaje de que sí existe y que por ningún motivo hay que perder la fe. Que sí existen los milagros, prueba clara soy yo. Si él me mantuvo vivo fue por algo y es para cambiar la mentalidad de la gente, para que sigamos creyendo en Él”.

La experiencia que vivió le hizo reafirmar su fe en Dios y espera que su testimonio ayude a cambiar la vida de las personas.

“El mensaje que les doy es tener una actitud positiva y cuando uno se propone algo puede lograrlo. He dicho en el accidente: dejo, Señor, en tus manos mi vida para seguir adelante. En ningún momento nos tenemos que rendir, a pesar de los problemas que estemos atravesando”, alentó Vidal. Recordó que estuvo atrapado en el avión 15 horas, de noche, escuchando los agonizantes quejidos de sus compañeros de viaje. Rezó en voz alta y trató de infundirles coraje. En cuanto pudo, envió el mensaje.

Los días que vivió en la selva le ayudaron a valorar más su familia y se comprometió ayudar a otras personas que lo necesitan.

“Uno de mis planes era ayudar a las personas dentro de mis posibilidades”, expresó.

Vidal confesó que sintió “un poco” de pánico la última vez que se subió y bajó de un avión, pero gracias a los deportes y a los accidentes, tuvo la fortaleza de superar sus temores.

ACCIDENTE La nave Fairchild Metro III de Aerocon con placa CP2548 salió de Santa Cruz con destino a Trinidad con siete pasajeros y dos tripulantes, a las 18:00. Minutos antes que aterrice en el aeropuerto Jorge Henrich desapareció de la torre de control.

Dos días después, el 8 de septiembre, fue encontrada la nave completamente destrozada a orillas de una laguna.

Ocho de los nueve ocupantes estaban muertos, pero el cuerpo de Minor Vidal no estaba.

El 9 de septiembre, una patrulla de los Diablos Azules de las Fuerzas Armadas rescató con vida a Minor Vidal.

Según Vidal, la noche del accidente, todos los pasajeros sintieron que algo no andaba bien en la nave pero que el piloto ni el copiloto informaron lo que sucedía. Calcula que el impacto fue cerca de las 19:15 y duró segundos.

Quince horas estuvo dentro del avión, herido, adolorido, enfrentando periodos de desmayo y esperando que el mensaje a su esposa le haya llegado aunque no había señal. En algún momento escuchó gemidos, pero todo estaba oscuro. Al día siguiente todo fue silencio.

A las 11:00 horas del día siguiente, recobró la conciencia y pudo salir del avión con mucha dificultad por las heridas en su cuerpo y las costillas fracturadas.

“En el momento que salí del avión recién me di una clara idea de lo que era la situación y vi los cuerpos. Lo primero que hice fue sentir el dolor que los familiares estaban atravesando”, contó Vidal.

Avanzó guiado por el sonido de las avionetas.

Datos.

Su salud

Minor Vidal tiene alta hasta que recupere “completamente” su salud. Aún tiene dolores en la espalda y costillas.

Se siente bien de salud y de buen ánimo, pero debe visitar periódicamente a un psicólogo.

Familia

La esposa de Minor Vidal, Mariela Llanos, lo acompañó en todo instante de la conferencia de prensa. Llanos dijo que ahora se dedica “a mimar” a su esposo junto a sus dos hijas, ante un sonriente Minor.

La empresa SAE donde trabaja Minor le dio vacación hasta

enero de 2012.

Botella

Una botella de plástico fue el tesoro de Minor Vidal, pues le permitió guardar su propio orín y agua que podía encontrar en su camino para poder aliviar su sed.

Fallecidos

Daniel Montenegro, Gilberto Gutiérrez, Sergio Marañón, Eddy Martínez, Óscar Valencia, Willam Lara, junto a los tripulantes Santiago Román y Mauricio Vlajovic, fallecieron en el accidente aéreo.

Aún desconocen causas del accidente

La Dirección de General de Aeronáutica Civil (DGAC) aún no tiene un informe oficial de las causas que causaron el accidente de la nave Fairchild Metro III con placa CP2548. Hay un plazo de hasta doce meses para que la DGAC brinde un informe de la investigación.

Igualmente, la Comisión que investiga las causas del accidente aún no se contactó con el único sobreviviente, Minor Vidal, para que revele datos del siniestro.

“La caja negra” fue enviada a Brasil para que sea sometida a investigaciones y hace un par de días retornó al país con un informe para la DGAC.

AEROCON La aerolínea Aerocon cubre los gastos médicos, de manutención y de transporte desde su rescate hasta su “completa” recuperación física, anímica y psicológica.

Los familiares de los ocho fallecidos en el siniestro aún no recibieron los beneficios de la aseguradora por trámites burocráticos como la declaratoria de herederos, certificaciones y otros procedimientos.

“Todas las familias están con el proceso iniciado con la aseguradora y se pagará lo que corresponda por ley”, dijo el portavoz de Aerocon, Nelson Kinn.

Aerocon cubre con regularidad los diez destinos programados bajo el compromiso de brindar los mejores servicios a sus usuarios.



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