Los equipos de búsqueda terrestre, acuática y aérea continuarán hoy con el rastrillaje en un radio de 20 kilómetros de la ciudad. Mientras la búsqueda avanzaba en difíciles condiciones, sin resultados positivos, ayer surgieron varias conjeturas sobre la nave, desde el hecho que se estrelló, hasta que pudo ser secuestrada.
Aerocon, dueña del avión, confirmó que la nave tiene un dispositivo que debe activarse en caso de golpes fuertes o siniestros y mandar una señal al satélite, para reportar su ubicación, lo que en este caso no ocurrió. Esto hace crecer la posibilidad de que la tripulación tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia y que los ocupantes, dos extranjeros y siete bolivianos, están incomunicados.
El gerente de la empresa Aerocon, Nelson Kinn, informó que mantienen la esperanza de encontrar a los siete pasajeros y dos pilotos con vida. “Oficialmente para nosotros la nave está desaparecida, no está destruida, no se estrelló”, dijo Kinn en un contacto telefónico con Opinión.
Sobre la versión del posible secuestro, el representante de Aerocon indicó que para ellos esa versión no tiene ningún asidero, pero que dejan las investigaciones a las autoridades correspondientes para descartar o confirmar todas las posibilidades.
“Estamos centrando el esfuerzo en la búsqueda de nueve seres humanos”, dijo Kinn.
Ayer también se conoció que unos campesinos escucharon una explosión cerca a una laguna, los equipos de rescate se dirigieron hasta el lugar sin embargo no hallaron ninguna señal. “Los rescatistas ingresaron a la laguna, pero no hay rastros”, dijo Kinn.
OCUPANTES Entre los pasajeros figuran dos extranjeros, inicialmente se dijo que son colombianos, pero en las últimas horas surgieron dudas sobre la nacionalidad de uno de ellos porque habría estado portando documentos falsos. Estos son Óscar Valencia y William Lara.
Los bolivianos son Sergio Marañón, Eddy Martínez, Joaquín Gutiérrez, Minor Vidal y Daniel Montenegro, todos mayores.
DIRIGENTE DE LA CIDOB Joaquín Gutiérrez, es dirigente de la Cidob y se informó que viajaba a Trinidad, para incorporarse a la marcha indígena que se encuentra en San Borja.
Los tripulantes, también bolivianos, el piloto Santiago Román y el copiloto Mauricio Vlahovic.
La nave, una Fairchild Metro III con placa CP2548 y con capacidad para 19 pasajeros, desapareció la noche del martes en la ruta entre la ciudad de Santa Cruz y Trinidad, capital de Beni, cuando cumplía un vuelo regular, con los siete pasajeros.
En los trabajos de rescate participan más de 10 brigadas de las Fuerzas Armadas, voluntarios y especialistas contratados por la empresa. Cuentan con tres helicópteros.
Desde Trinidad se informó que la densa humareda ocasionada por los chaqueos indiscriminados, dificultan las operaciones de rescate.
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