La Empresa Brasileira de Aeronáutica S.A. de Brasil (Embraer) ofreció al gobierno de Evo Morales tres modelos de aviones presidenciales de primera clase. Las aeronaves tienen en común su división en tres cabinas; una de ellas es una especie de dormitorio para el Presidente.
La información la proporcionó el representante de la empresa, Carlos Franca, quien detalló que los aviones con características de uso presidencial son el Lineage-1000, que cuesta aproximadamente 40 millones de dólares; el Embraer, de 50 millones de dólares, y el Legacy 600, que tiene un precio que va de 20 a 30 millones.
Los aviones presidenciales están divididos en tres cabinas. “La primera es para el personal de apoyo como el jefe de seguridad; la otra cabina se utiliza como una sala de reuniones y hay una cabina privativa del Presidente, donde puede entrar una cama”, explicó el representante.
El ministro de Defensa, Walker San Miguel, informó a La Razón que la empresa, como el Gobierno de Brasil, a través de su embajador en Bolivia, Frederico de Araujo, expresaron su interés en vender un avión presidencial. Incluso reveló que se ofreció financiar esta compra con un crédito concesional del Banco de Desarrollo del Brasil (Bndes).
Franca explicó que el mantenimiento de la aeronave no reviste problemas porque se lo puede hacer en Argentina, Ecuador y Brasil, donde también se pueden adquirir los repuestos.
“Un avión presidencial no es igual que para un pasajero normal, hay requisitos de seguridad, comodidad y comunicación que lo transforman en un despacho o una oficina voladora”, insistió.
La administración de Morales decidió comprar un avión para uso presidencial. Además de Brasil, Rusia está interesada en proveer esta aeronave y ofreció un Antonov-BJ a un costo de 30 millones de dólares.
“Creo que habrá dos ofertas. Las vamos a someter al proceso de condiciones técnicas... y económicas”, anunció San Miguel.
La información la proporcionó el representante de la empresa, Carlos Franca, quien detalló que los aviones con características de uso presidencial son el Lineage-1000, que cuesta aproximadamente 40 millones de dólares; el Embraer, de 50 millones de dólares, y el Legacy 600, que tiene un precio que va de 20 a 30 millones.
Los aviones presidenciales están divididos en tres cabinas. “La primera es para el personal de apoyo como el jefe de seguridad; la otra cabina se utiliza como una sala de reuniones y hay una cabina privativa del Presidente, donde puede entrar una cama”, explicó el representante.
El ministro de Defensa, Walker San Miguel, informó a La Razón que la empresa, como el Gobierno de Brasil, a través de su embajador en Bolivia, Frederico de Araujo, expresaron su interés en vender un avión presidencial. Incluso reveló que se ofreció financiar esta compra con un crédito concesional del Banco de Desarrollo del Brasil (Bndes).
Franca explicó que el mantenimiento de la aeronave no reviste problemas porque se lo puede hacer en Argentina, Ecuador y Brasil, donde también se pueden adquirir los repuestos.
“Un avión presidencial no es igual que para un pasajero normal, hay requisitos de seguridad, comodidad y comunicación que lo transforman en un despacho o una oficina voladora”, insistió.
La administración de Morales decidió comprar un avión para uso presidencial. Además de Brasil, Rusia está interesada en proveer esta aeronave y ofreció un Antonov-BJ a un costo de 30 millones de dólares.
“Creo que habrá dos ofertas. Las vamos a someter al proceso de condiciones técnicas... y económicas”, anunció San Miguel.
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